El asesinato de Chalino Sánchez sigue siendo un misterio.
Pero la leyenda que se ha creado alrededor de su muerte, sigue despertando la fascinación entre sus admiradores, un mito nació con el fallecimiento del cantante de corridos a los 31 años.
Cuando lo macabro se cruza en el camino de la música, las ventas de discos aumentan.
La música de Chalino Sánchez, se declina muchas veces en compilaciones de canciones que se repiten, entre ellas: "Nieves de Enero", "El Crimen de Culiacán", "Los Chismes", títulos que forman parte del patrimonio mexicano, y que cuentan hoy en día, con millones de reproducciones en YouTube o Spotify.
Charlino Sánchez nació en una de las zonas más peligrosas del mundo
El músico, Charlino Sánchez llegó al mundo el 30 de agosto de 1960, en la región norte del país. Su nacimiento ocurrió en paralelo con el del Cártel de Sinaloa, que, en cuestión de años, se volvió el más poderoso de México.
Desde muy pequeño se interesó en la música y comenzó a incursionar cuando muchos de los delincuentes con los que se codeaba, le pagaban por escribir canciones que narrasen sus hazañas. Con el paso de los años se acercó más al mundo de los barones de la droga y de ahí surgen las dos hipótesis que podrían esclarecer el caso de su prematura muerte.
La vuelta a México y el asesinato
La segunda hipótesis de las causas del asesinato de Charlino, parece ser la que convence a más personas. Al volver a dar un concierto a México y siendo ya muy popular, los secuaces del hombre asesinado diez años atrás, quisieron vengarse.
La policía de Estados Unidos y sus familiares le pedían regresar del otro lado de la frontera, para evitar cualquier tipo de represalias. Pero, Charlino les tranquilizó diciendo que, seguramente ya habían olvidado lo sucedido, y que podían estar en paz.
Sin embargo, la noche del 25 de enero de 1992, al terminar un concierto en el que sus mismos músicos dicen haberle visto muy nervioso, Charlino Sánchez subió en un automóvil en compañía de algunos familiares. En el camino fueron detenidos por agentes de la policía que le pidieron bajar del coche para, supuestamente, hablar de las amenazas que había recibido.
A la mañana siguiente, el cuerpo de Charlino Sánchez fue encontrado en un campo de cultivo con un disparo en la parte posterior de la cabeza. Marca de la macabra ejecución, del Cartel de Sinaloa.
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